El valor por el dinero fue excelente, la habitación era cómoda y limpia, con impecables detalles decorativos y todos los servicios necesarios. La ubicación en una pintoresca barriada de pescadores, con una terraza maravillosa y vistas al precioso mar de Lanzarote, fue perfecta para unos días tranquilos en el norte de la isla. Además, el anfitrión Daniel fue muy atento, educado y disponible.

El desayuno podría haber mejorado con sábanas más frescas para esta época del año, aunque supongo que es cuestión de gustos.

Nos encantó nuestra estancia en Casa El Charco! La habitación era acogedora y cómoda, con todo lo necesario para una familia con niños. Nos gustó mucho la ducha, era amplia y tenía buena presión de agua. La ropa de cama también era muy agradable.

La verdad es que nos hubiera gustado tener otro baño. Pero es solo mi opinión y sé que a otros huéspedes no les importaría.

El personal del hotel habla alemán, inglés, español y francés, es decir, ¡hablan más idiomas que el mismísimo Babelfish! Siempre dispuestos a ayudar las 24 horas del día, sin importar cuál sea tu pregunta o problema.

El único inconveniente fue que me hubiera gustado poder quedarme más días en este increíble hotel. ¡Nos encantó tanto que no queríamos irnos!

Increíble ubicación en barriada pintoresca y tranquila con vista al mar! Casa muy cómoda y bien equipada, con patio interior privado y estacionamiento. Anfitrión atento y disponible. Recomendada para días tranquilos en el norte de la isla. 👌

La habitación en Casa El Charco era muy acogedora y pintoresca. Me sentí como si estuviera durmiendo en una casita típica canaria. La cama era increíblemente cómoda y las sábanas estaban limpias y frescas. Disfruté mucho de mi estancia como viajero de negocios.

Aunque la ducha funcionaba bien, me hubiera gustado tener un baño adicional para mayor comodidad. Pero entiendo que esto es solo mi opinión y otros huéspedes podrían disfrutarlo de todas maneras.

La casa tenía hasta el más mínimo detalle. Cualquier cosa que se pueda necesitar, la tiene, además de una cuidada y bonita decoración. La localización y las vistas son excepcionales… Desayunar después de un bañito en frente o tomar un vinito al final de la jornada en esa terraza con el océano delante, no tiene precio. el trato con Daniel, el propietario, es estupendo. Al final te vas con las ganas de haberte quedado algún día más. La casa armoniosa, sencilla, muy acogedora y confortable. Amplia y muy luminosa. Cubriendo cualquier necesidad, lavadora, tendedero, útiles de cocina, etc. Destacar como no podía ser de otra manera el salón, las vistas espectaculares. ¡Parecía que ibas a tocar el agua del mar desde el sofá!

No pude encontrar ningún fallo. 😊

La ubicación de Casa El Charco es excepcional, con una terraza que ofrece una vista maravillosa al mar y una ventana encantadora en el salón comedor. Las instalaciones, el equipamiento y los utensilios son más que satisfactorios. La limpieza es sobresaliente y destaco la atención constante del dueño, Daniel, quien se preocupó por nuestro bienestar.

En cuanto a las desventajas, una de las habitaciones es un poco pequeña y está cerca de la calle, pero las camas son muy cómodas y no hay ruido externo. Además, la habitación principal es bonita y cómoda, aunque le falta algo de intimidad debido a una ventana que da al pasillo.

Me encantó la ubicación, con unas vistas espectaculares desde el salón y la terraza. Además, el acceso al mar estaba justo al lado, perfecto para disfrutar de un baño refrescante. La casa estaba equipada con todo lo necesario, desde lavadora hasta utensilios de cocina. También destacaría la limpieza impecable y el dueño muy atento y cercano.

Hubo una habitación que, aunque era cómoda, le faltaba un poco de intimidad debido a una ventana en el pasillo.

Me encantó la decoración de la casa, cada detalle estaba cuidadosamente elegido y transmitía una sensación de calidez y confort. Los espacios comunes eran amplios y accesibles, lo cual fue perfecto para mí como persona mayor. Además, la ubicación cerca del mar y la tranquilidad del vecindario pintoresco hicieron que mi estancia fuera realmente relajante.

Me hubiera gustado que hubiera actividades o servicios específicos para personas mayores, como excursiones adaptadas para nosotros o programas de entretenimiento enfocados en nuestras necesidades.

La limpieza impecable y las excelentes instalaciones del hotel hicieron de mi estancia una experiencia maravillosa. Además, el fácil acceso al estacionamiento y el transporte público hicieron que mi estancia fuera muy conveniente. La ubicación también era ideal, con hermosas vistas y cerca de todas las atracciones locales. No puedo olvidar mencionar lo amable y atento que fue el personal del hotel, siempre dispuesto a ayudar en todo momento.

Nada que decir.

La casa es una MARAVILLA. El lugar, la calma, la comodidad. Levantarte todos los días en esta casa daba sensación de alegría y bienestar. Se nota que han cuidado todos los detalles y tuvimos todo lo que necesitamos para nuestra semana de vacaciones. La casa está limpia, cuidada, y es confortable y hogareña. Gracias a los anfitriones por su hospitalidad y atención. Ha sido una semana maravillosa.

De verdad que lo aconsejo.

Las vistas desde el salón/cocina son magníficas. Terraza trasera con acceso a una calita agradable. Casa bien equipada, no falta nada.

Me sentí muy relajado, no he tenido ningún inconveniente.

El valor por mi dinero fue excelente y la habitación era luminosa, amplia y muy cómoda. Me encantó la vista espectacular desde el salón, parecía que podía tocar el agua del mar desde el sofá. La ubicación excepcional, con una terraza que daba al mar y una ventana mágica en el salón comedor. Además, la atención continuada del dueño, Daniel, por nuestro bienestar estuvo por encima de todo lo demás.

El desayuno del hotel podría mejorar. Las sábanas eran un poco calurosas para esta época del año, aunque ya tenían funda nórdica.

Me encantó la decoración, muy cuidada y bonita, con todos los detalles que hacen sentirse como en casa. Además, la casa está totalmente adaptada para personas mayores, con espacios amplios y sin escaleras. Esto hizo que mi estancia fuera muy cómoda y sin preocupaciones.

La única cosa que pediría para unas vacaciones aún mejores para personas mayores sería tener más ayuda del personal del hotel. Aunque los niños que trabajaban allí fueron amables, a veces necesitaba más ayuda y apoyo para moverme por la casa y el área circundante.